«Ícaro» e «Ikaria» representan lo masculino y lo femenino de la Humanidad misma. Simbolizan la multiplicidad del ser, mujeres y hombres, todo aquello que sentimos distante y a menudo no comprendemos, o incluso tememos y marginalizamos: lo que para cada uno de nosotros es distante en el tiempo, lo que es distante en la geografía y lo que es distante en las decisiones o las condiciones de vida.